Conocimientos y técnicas tradicionales asociadas con el Barniz de Pasto Mopa-Mopa, Putumayo-Nariño
Conocimientos y técnicas tradicionales asociadas con el Barniz de Pasto Mopa-Mopa, Putumayo-Nariño
Entre el Piedemonte Andino-Amazónico en Putumayo y Nariño, recolectores y artesanos dan forma a la naturaleza andina.
Desde el proceso de recolección del arbusto Mopa-mopa en las selvas del Putumayo, hasta la transformación de la madera y la decoración con Barniz de Pasto en las manos de artesanos locales, la técnica artesanal pre-hispánica del Mopa-Mopa se ha destacado por ser un referente de oficio tradicional de la Región Surandina del país. A lo largo de los siglos, la ruta cultural del Mopa-mopa ha fortalecido los procesos de dignificación y valoración del oficio, así como la sostenibilidad ambiental de la región.
Testimonio
Es una resina natural que sale de un árbol. Nosotros como artesanos lo preparamos. Esto tiene un proceso como de maceración con una maceta, se lo cocina, se lo estira. Luego se lo comienza pues a preparar, a batir, hasta que se le sacan todas las impurezas que salen del árbol que son como pedacitos de madera y todo eso, hasta que queda totalmente limpio. Luego ya se le comienza a hacer procedimientos con anilinas y purpurinas.
Mary Ortega es una artesana del barniz de Pasto. Trabaja la resina del árbol Mopa-Mopa en su taller junto con su esposo Mario Narváez. Ambos se han enfocado en seguir manteniendo la tradición que su esposo heredó. Hoy sus dos hijos también aprenden la técnica.
Ximena Thiermann
“Esto ha venido de tradición familiar, ¿no? Siempre ha sido de padres a hijos, de abuelos a nietos, pero siempre ha estado como en el vinculo familiar. Ya, yo aprendí en la casa de Pedro Narváez que es el esposo de mi tía, aprendí más o menos, a la edad como de, o me inicié digamos en el barniz como a la edad de 8 a 9 años. Entonces yo empecé fue lijando las bandejas en madera que hacían y fui mirando como Pedro trabajaba con otros amigos de el que trabajaban en el taller. Fui mirando como dibujaban las momias, como echaban quingos, como aplicaban guardas y por ahí me fui como enfocando porque yo empecé como les digo, empecé lijando, pintando y luego ya fue que me fui acercando al taller, me fui quedando, ahí en el taller y fui mirando cómo ellos decoraban entonces me llamó mucho la atención cómo preparaban el material, que lo echaban al agua hirviendo, lo sacaban con las manos, luego, lo que ellos decoraban, por ejemplo empecé a ver las flores, empecé a ver los paisajes, entonces eso me llamó mucho la atención y Pedro de Narváez pues me fue como vinculando en el taller y me fue dando la oportunidad y me decía practique, tome haga esto, ande haciendo esto otro y así le fui cogiendo, digamos el amor que uno le coge al barniz, a la técnica y me fui vinculando al taller con ellos”.
…”En el barniz, las imágenes más importantes podrían ser las flores digamos, podrían ser las momias y guardas, y podrían ser los diseños precolombinos”.
Richard Valderrama tiene 48 años y se inició en las prácticas relacionadas con el Barniz de Pasto hace aproximadamente 40. Cuenta que este es un saber que se ha transmitido de generación a generación y que hoy busca hacer talleres para que quien tenga interés en la práctica pueda hacerlo mientras ayuda a salvaguardar los conocimientos relacionados a la manifestación.
Ximena Thiermann
Fotografías: Exposición fotográfica Memoria Viva
Richard Valderrama
Mary Ortega