Inicia
noviembre 22, 2023 - 9:00 am
Termina
noviembre 23, 2023 - 4:30 pm
Dirección
Salones W_102 y RGD_001, Universidad de los Andes, Bogotá Ver mapaMiércoles 22 de noviembre de 2023
Hora: 09:15 a.m.
Lugar: salón W_102, Universidad de los Andes, Bogotá
Jueves 23 de noviembre de 2023
Hora: 01:00 p.m.
Lugar: salón RGD_001, Universidad de los Andes, Bogotá
Programación
09:15 a.m.
Bienvenida a cargo de Rondy Torres, director de la Escuela de Posgrados de la Fac. de Artes y Humanidades, Universidad de los Andes
Mesa 1: Colombia | Moderador: Rondy Torres
09:30 a.m. Un bicentenario entre libros y stories | María Paula Arias, M. en Museología y Gestión del Patrimonio (UNAL)
10:00 a.m. El buen gusto, la inspiración, lo verdadero: usos simbólicos de las musas de Filippo Mastellari en el Teatro Colón de Bogotá a finales del siglo XIX | María Alejandra Uribe, M. en Estudios Clásicos (Uniandes)
10:30 a.m. El chino Agapito a quien todos conocemos: una fábula de movilidad social por Ricardo Silva | Leonardo Garay, M. en Literatura (Uniandes)
11:00 a.m. Café
Mesa 2. | Moderadora: Ana María Franco
11:30 a.m. Mascarada masculina en los Interiores de Ana Mercedes Hoyos | Nicolás Perilla, M. en Historia del Arte (Uniandes)
12:00 m. Manglares visuales | Juliana Bermúdez, M. en Museología y Gestión del Patrimonio (UNAL)
12:30 p.m. La formación musical de Charly García | Juan José Paz, M. en Música (Uniandes)
01:00 p.m. Almuerzo
Mesa 3: Identidades | Moderador: Rondy Torres
02:00 p.m. Catalina de Elisa Mújica: mujeres, silencio, escritura e historia | Elisabeth Acevedo, M. en Literatura (Uniandes) *Ponencia virtual
02:30 p.m. La figura del cabello alisado en «Hair: a narrative» (1982) de Cheryl Clarke y Ese cabello (2015) de Djaimilia Pereira de Almeida | Laura Tapia, M. en Literatura (Uniandes)
03:00 p.m. Analepsis de Nirma Zárate en los 80 y 90: entre la abstracción y el arte político | Álvaro Sebastián Jiménez, M. en Historia del Arte (Uniandes) *Ponencia virtual
03:30 p.m. Si el sonido perturba, ahí es: una mirada sobre el proceso creativo de dos compositores afroamericanos de la segunda mitad del siglo XX | Daniel Pulido, M. en Música (Uniandes)
04:00 p.m. Café
Mesa 4: Rupturas | Moderador: Camilo Hernández
04:30 p.m. Homo poeticus – un pensar poético en las formas de educar | Juan Carlos Londoño, M. en Lingüística (UTP)
05:00 p.m. Aiesthesis decolonial en Había mucha neblina o humo o no sé qué (2017) | Alexander Castillo, M. en Literatura (Uniandes)
05:30 p.m. ¿Los conciertos en el metaverso son realmente conciertos? | Yeshica Ochoa, M. en Música (Uniandes)
Mesa 5: Oficios | Moderador
01:00 p.m. Tres pautas, un recorrido. Recorrido metodológico, a través de la improvisación, para procesos de composición musical | Hernán Darío Guzmán, M. en Música (Uniandes)
01:30 p.m. El gótico como género literario: un viaje desde sus raíces europeas a la adaptación latinoamericana | Javier Gómez, M. en Literatura (Uniandes)
02:00 p.m. El cielo era verde: concierto de grado guitarra sola | Esteeven Niño Durán, M. en Música (Uniandes)
02:30 p.m. Café
Mesa 6: Desconstrucciones | Moderador: Rondy Torres
03:00 p.m. El hacer del cuerpo: memoria, repetición y experiencia | Gustavo Donado Ahumada, M. en Literatura (Uniandes)
03:30 p.m. Fe estética y duelo | Christian Dávid Reinach, M. en Historia del Arte (Uniandes)
04:00 p.m. Todo sobre el dolor de mi madre: reflexiones fenomenológicas sobre el dolor crónico de un familiar | Rossangélica Peralta Parra, M. en Historia del Arte (Uniandes)
Resúmenes de las ponencias
El análisis de las 61 stories del Bicentenario publicadas en el perfil de Instagram de la Red Cultural del Banco de la República, entre enero del 2020 y julio de 2022, respalda dos de los hallazgos de este estudio dedicado a reconocer la naturaleza de la mediación que en redes sociales están haciendo los museos e instituciones colombianas para enriquecer las interacciones con sus públicos: por una parte, el aporte decisivo de los equipos humanos en la ideación, desarrollo y sostenibilidad de estas estrategias; por otra, el imprescindible reconocimiento del lenguaje de internet caracterizado por la informalidad como valor en esta actuación en redes sociales. Como el estudio sugiere, las migraciones tecnológicas de los museos, centros de documentación e instituciones culturales demandan la atención y el cuidado de las personas que ya estaban, de las que se incorporan, y de las que participan transitoriamente en este tipo de iniciativas para que realmente sean eficaces y sostenibles. Son esos equipos inter —disciplinarios y etarios— vinculados al trabajo de planta o autónomo, quienes, aportan la fluidez en los lenguajes de internet encarnados en la presencia de las imágenes pobres (Hito Steyerl) y la informalidad visual y la oral (Gretchen McCulloch).
La presente ponencia busca compartir el devenir investigativo del trabajo con el cual optaré por mi título de maestría. Se trató de una investigación sobre los frescos de seis de las nueve musas griegas, pintados por Filippo Mastellari en 1892, para el plafón del Teatro Colón de Bogotá. Del análisis visual y espacial de la composición de estas musas se desligaron apuntes reflexivos sobre la presencia del discurso artístico neoclásico en la estipulación del proyecto nacional impulsado por los intelectuales de la Regeneración, entre quienes se encontraban Rafel Núñez y Miguel Antonio Caro. La simetría, la imitación, la apreciación, lo divino y lo verdadero serán, entonces, algunos de los conceptos centrales, los cuales circulan como producto de la recepción del arte griego clásico (específicamente a través del discurso neoclásico) y participan en la configuración del intelectual y del nuevo ethos burgués de la capital. Como consecuencia de la reflexión de los conceptos estéticos entendidos como un sistema de símbolos se desprende un discurso social, político y estético, en el marco de la configuración de la burguesía capitalina.
A Salustiano Villar está dedicado «El niño Agapito”; “Villar creía en la superioridad de su clase, y en su derecho divino a gobernar para felicidad de las clases inferiores; era un hombre de sentimientos aristocráticos” (Santos Molano). A esta clase, en la que Villar fundaba su engreimiento, según Enrique Santos Molano, a esta clase, ingresa Agapito en el artículo de costumbres que Ricardo Silva Frade le dedica. Pretendo mostrar dos procedimientos que Silva lleva a cabo en “El niño Agapito”: El primero, la construcción del “niño Agapito” como tipo social y sus especificidades atravesadas por la raza, la clase social y las disciplinas productivas; en segunda instancia, la fábula de ascenso social que el autor bogotano elabora para Agapito, para insertar a este sujeto, perteneciente a una clase social baja, previamente descrita y construida, por medio de su caracterización, la de Agapito, como “mercachifle”, en la clase social “acomodada”. Así, sostendré que estos dos procedimientos se conjugan para narrar uno de los modos del proyecto civilizador liberal que ve en el comercio global, el mestizaje y la división del trabajo capitalista una forma de “desarrollar” a la nación y a su pueblo.
En los tardíos años sesenta, la artista colombiana Ana Mercedes Hoyos empezó a producir una serie de pinturas titulada Interiores. En estas obras de registro descentrado, los muros de los rincones, en lugar del exceso de datos escénicos, se apoderaron del plano visual. La prominencia rectilínea y la concreción de estos elementos arquitectónicos acercó, pues, las delicadas pinceladas de Hoyos al trabajo de una constructora: una mujer aguerrida y adusta que, transgrediendo el papel de una abnegada ama de casa, esposa o madre, veía en el entorno doméstico, en el espacio más próximo, no un telón de fondo para la vida familiar o para ceñirse a nociones clásicas de una feminidad burguesa confinada en el encierro y sumisa, sino todo lo contrario. A saber, el potencial de segmentar, abstraer y desfigurar el hogar como la esfera que socialmente se le asignaba, poniendo el énfasis en analizar la fuerza y dureza constructiva, en la impenetrabilidad visual y simbólica, y en introducir matices ominosos, adoptando, así, una provocadora mascarada masculina.
Los manglares son zonas de juego, espiritualidad, trabajo y transformación para las comunidades que viven, se transforman o desaparecen en compañía de otras especies, en las costas intertropicales de África, América y Asia, zonas habitadas por estos ecosistemas. Pese a ello, las representaciones de los manglares suelen desconocer la riqueza local, ancestral, colectiva y simbiótica del ecosistema, mostrándoseles utilitariamente al servicio de las instituciones que demandan y sostienen dichas representaciones: tala de bosques, daño climático, sostenibilidad ambiental, misiones políticas o educativas, exotismo turístico, escenografías de entretenimiento, protección de memorias y patrimonios. Las estrategias de investigación visual y los intercambios presenciales situados son parte de la metodología. Iniciamos revisando crítica y colectivamente los archivos audiovisuales especializados en manglares que reposan en Señal Memoria de Radio Televisión Nacional de Colombia —RTVC—, los audiovisuales de la base de datos online de películas IMDb, las copias del Archivo Fotográfico de San Andrés/Colombia de la Biblioteca Luis Ángel Arango, los logos de las instituciones nacionales e internacionales que se declaran cuidadoras de los manglares, además de las publicaciones de la unidad de medios Unimedios, de la Universidad Nacional de Colombia, en las que se vinculan los manglares al cumplimiento de la misión institucional.
¿Qué beneficios creativos tiene la formación musical clásica en la composición de músicas populares, en especial en el Rock Argentino de los años 70’s? ¿Cómo es que el refinamiento y la pulcritud de la música clásica termina siendo una herramienta fundamental usada para expresar ideales rebeldes y ruidosos en un género como el Rock? Estos mundos se unen en el músico argentino de Rock Charly García, quien tuvo una formación musical clásica y es uno de los íconos más grandes del movimiento del Rock en Argentina. Se analizará su primer trabajo discográfico, Vida (1973), perteneciente a su primera agrupación musical, Sui Generis, para así evidenciar, por medio de ejemplos concretos que la formación musical clásica aporta muchas herramientas compositivas interesantes e innovadoras, aplicables a otros géneros musicales, y, por lo tanto, se dan como resultado producciones artísticas más ingeniosas, interesantes y genuinas. Este análisis logrará evidenciar también cómo la estética de la música clásica, tan correcta, refinada y pulcra termina siendo usada y aplicada en un contexto rebelde y ruidoso, como lo es la estética Rock de los años 70’s en Argentina.
Elisa Mújica es una de las autoras colombianas del siglo XX que es ampliamente conocida en los círculos culturales, pero que no es muy leída ni conocida por el gran público. La ponencia que propongo pretende unir su interpretación de Catalina, la segunda novela de la autora, a una tradición crítica que se ha esforzado por integrar la narrativa de la escritora a la historia literaria colombiana. Catalina aborda la historia de una mujer de clase alta que se ve atrapada entre las limitadas posibilidades que una provincia como Bucaramanga le ofrece en medio de un intento de recuperación de las guerras civiles que marcaron el siglo XX en Colombia. Dado que la novela está relatada desde la primera persona, la interpretación que ofrezco parte de la hipótesis de que la narración es, en realidad, un momento de escritura que se manifiesta como una posibilidad para la expresión de una subjetividad que le fue negada a la protagonista durante toda la novela. Pensar desde acá la narración, habilita un dialogo muy interesante con otras novelas como, por ejemplo, Madame Bovary.
Existen distintas formas de alisar el cabello, en su mayoría implican dolor físico o, por lo menos, calor intenso en la cabeza. El poema de Clarke y el texto de Djaimilia cuestionan la razón por la que muchas mujeres negras se someten a este dolor y encuentran respuesta en el racismo interiorizado. En el poema, este racismo es heredado de la figura materna y en la ‘novela’ se personifica a través del ‘supremacista en miniatura’. En ambos, el cabello aparece como un lugar de opresión sobre el que recaen violencias sistemáticas. El acto de alisarlo, entonces, aparece como una salida a estas violencias en tanto que implica cierto ´blanqueamiento’. No obstante, la constante producción de discursos –racistas y antirracistas– termina por devolver al cabello afro a un lugar perpetuamente violentado.
En la historiografía del arte colombiano, se ha ahondado en una variedad de nombres representativos del arte contemporáneo, a partir de sus vidas, obras y aportes a la cultura y el arte. Pese a ello, existen pocas referencias de mujeres artistas que no se haya reconocido su trabajo artístico. Nirma Zárate es una de ellas, si bien, se ha mencionado ella por haber participado en salones y exposiciones del orden nacional e internacional o por haber hecho parte de colectivos artísticos como Taller 4 Rojo y Causa Roja en la década de los setenta, Estas referencias no hacen justicia en relación con la importante aportación que hizo ella al arte, a la sociedad colombiana desde lo pedagógico y lo político, incluso desde otros enfoques como el medioambiental. Este trabajo de investigación busca ampliar la visión que se tiene de esta artista a partir de sus obras recientes realizadas entre la década de los ochenta y noventa, y cómo esta se vinculó con otros sectores de la sociedad como los campesinos y los artesanos en los territorios. Con sus investigaciones y experimentaciones logra a través de la producción de papel con fibra vegetal resaltarlo como medio expresivo y potenciar su aplicabilidad con técnicas gráficas como la colografía. En un intento de relacionar dos etapas importantes de la artista como lo fueron el abstracto y el arte político, se busca analizar con esta investigación cómo estos periodos definieron su producción plástica desde lo conceptual, simbólico y técnico en sus últimas etapas, vislumbrar los procesos que tuvo que transitar para integrarlos en su producción artística tardía y del mismo modo resaltar su rol como mujer artista.
Este proyecto reflexiona las causas del pensar poético, el uso de metáforas en la prosa poética de una población, para establecer la importante tarea del desarrollo del pensamiento, que sostiene un debate desde la lingüística cognitiva, la filosofía y demás, que estructuran metafóricamente gran parte de nuestra cognición. Las estructuras cognitivo-metafóricas son una apertura creativa del mundo, son en últimas, un pensar poético. Así, esta investigación de corte hermenéutico valora la reflexión poética en el marco de una apuesta filosófica del lenguaje. Por esta razón las fronteras entre las áreas del saber se borran; el arte y la poesía ya no son instrumentos que apelan solo a la belleza de su composición, sino que permiten una comprensión de los fenómenos humanos. El desarrollo del pensamiento metafórico apela al entendimiento del mundo para transformarlo. Por tal motivo, esta investigación tiene como fin comprender la estrecha relación entre las estructuras metafóricas del pensamiento poético, acordes a una filosofía educativa encarnada en el verbo, desde la retórica y las metáforas del lenguaje poético.
Interesa reflexionar desde la óptica decolonial de Walter Mignolo cómo Cristina Rivera Garza desarrolla una lectura crítica de la figura de Juan Rulfo, mediante lo que podríamos llamar escritura collage o sampleo. Para ello, se indaga el modo en que los procesos de apropiación y desapropiación, que CRG postula en su libro Los muertos indóciles (2013) y Escrituras geológicas (2022), se hacen presentes en esta dinámica cuyo propósito es romper con “lo sagrado” que ha generado la mitificación de Juan Rulfo. (Esta ponencia presenta los avances del trabajo de grado de Maestría).
Durante la investigación para mi tesis de maestría sobre el estudio del metaverso como un espacio para conciertos, surge una pregunta continuamente: ¿Los conciertos en el metaverso pueden ser realmente llamados conciertos? Durante esta investigación se realiza un análisis histórico sobre la evolución de los conciertos y se propone el uso de una herramienta para entender estos nuevos espacios.
Al hacer una reflexión profunda sobre la improvisación he llegado a diversas preguntas: ¿Cómo sueno?/¿Cómo me escucho?; ¿Cómo suena el otro? / ¿Cómo escucho al otro?; y ¿Cómo sonamos? / ¿Cómo nos escuchamos? El escuchar y escucharse, el sonar solo y en conjunto, me llevó a estructurar mi proyecto de maestría, donde estas cuestiones sirven como pautas para improvisar. El objetivo del trabajo es crear un catálogo de obras, en su mayoría para soporte fijo a ocho canales, las cuales muestren un recorrido por las preguntas que se pautaron al inicio y de las que se espera como resultado una ruta metodológica, desde la improvisación, para la creación de obras musicales. En la presente ponencia se espera explicar el proceso que estoy llevando a lo largo de mi proyecto de tesis. Para esto se mostrarán los avances con tres obras que se he compuesto a lo largo de mi estancia en la Maestría en Música de la Universidad de Los Andes. Con esto se pretende exponer la metodología y los resultados que ha arrojado la misma en mi investigación.
Surgiendo en Inglaterra del siglo XVIII como un contrapunto a la racionalidad del Iluminismo, el género gótico tejió elementos sobrenaturales y oscuros en entornos medievales y exóticos. Novelas como «El castillo de Otranto» de Horace Walpole exploraron temas de lujuria, violencia y lo insólito, desafiando la cosmovisión racionalista imperante. A medida que el género gótico se extendió a Estados Unidos y América Latina durante los siglos XIX y principios del XX, experimentó una transformación. Los escritores latinoamericanos, influenciados por sus experiencias culturales únicas y contextos históricos, infundieron el género con elementos de realismo mágico y preocupaciones locales, dando lugar a una variante distintiva conocida como «gótico latinoamericano». Autores como Julio Cortázar, Julio Llamazares, Laura Esquivel y Jorge Luis Borges ampliaron aún más el género gótico en América Latina, explorando temas de soledad, violencia, muerte e identidad en contextos latinoamericanos específicos. La influencia del género se extendió más allá de la literatura, impregnando otras formas artísticas como el cine y la música. Desde sus orígenes europeos hasta su adaptación latinoamericana, el género gótico ha demostrado una versatilidad y durabilidad notables. Su atractivo duradero radica en su capacidad para adentrarse en los misterios de la condición humana, ofreciendo una ventana a la oscuridad y lo desconocido que persisten en nuestro mundo.
Consiste en abordar la interpretación musical de la obra Ciclo del Exilio Op.47 de Guillermo Rendon García. El proyecto requiere la conceptualización de la práctica instrumental como una metodología para montaje del concierto de grado. La problemática parte de intuiciones sobre aspectos técnicos, corporales, estéticos y creativos, en la búsqueda de responder a la inquietud de cómo potenciar habilidades con el instrumento, desde estrategias que respondan a las exigencias expresivas e interpretativas que conlleva el montaje del concierto de grado para optar al título de maestría en música.
El cuerpo en su manifestación discursiva es capaz de transmitir la experiencia de la alteridad. Al habitar un cuerpo determinado por la alteridad o marcado por la «diferencia», se constituye una escritura con la que se busca y se piensa al cuerpo desde su propia materialidad. Por ende, se propone un análisis sobre la escritura como un ejercicio que posibilita la interpelación de la exterioridad y la alteridad cuando se cuenta la experiencia a través del discurso literario; porque la escritura permite la construcción de múltiples corporalidades marcadas por la huella de lo distinto.
Aun cuando las explicaciones racionales puedan dar calma y permitir un descargue de ansiedad al moribundo, al angustiado, al doliente o al sufriente, siempre nos queda la pregunta de ¿por qué? ¿por qué en ese momento? ¿por qué no antes? o ¿por qué no después? Lo que nos deja una sensación de vacío que produce insatisfacción. A partir de ello, podemos preguntarnos genuinamente, ¿para qué aproximarnos a nuestra muerte desde la razón ya mencionada; para qué conceptualizar la muerte categórica, inamovible y abstractamente? Aun siendo conscientes de que estos intentos tienen motivaciones sociales y culturales que no pueden ser trivializadas, ¡ni mucho menos! Pero los vacíos me hacen considerar que, primero, deberíamos optar por acercarnos emocionalmente a nuestra muerte, tanto la mía como la de mis coetáneos, y luego podríamos intentar formular una aproximación fundamentalmente intelectual. En ese sentido, propongo que ese primer acercamiento emocional es posible a través de una fe estética, como proceso subjetivo y terapéutico que, además, nos acompaña en el duelo o nos da fuerzas para acompañar al moribundo, o al doliente.
El dolor, en tanto experiencia, es dicotómico: me hace consciente de mi cuerpo y, a la vez, me aleja de él y lo objetiviza —ya sea por la mirada que el otro ejerce sobre mí o por la magnitud de sus sensaciones—. Aunque en diversas ocasiones puede ser localizable ―un dolor de cabeza, un dolor lumbar o de estómago―, irrumpe en la vida como experiencia totalizante; en definitiva, su carácter radical lo convierte en signo definitivo de humanidad. Es esta experiencia de la cual se vale este ensayo crónico-narrativo para, por medio de algunos referentes de la filosofía y la fenomenología sobre el dolor crónico, narrar uno de los tantos temas inexpresables: el dolor que atraviesa el cuerpo de una madre, de mi madre Sandra. Así pues, siguiendo como motivación la labor literaria y filosófica que realiza Moscoso en Historia cultural del dolor (2011) y Sara Ahmed en su capítulo “La contingencia del dolor” del libro La política cultural de las emociones (2015), me arrojo a registrar y analizar las experiencias de mi madre permeadas por su vivencia del cuerpo en dolor crónico constante.
La ponencia se enfoca en trabajar y comprender características del proceso creativo de los compositores Charles Mingus, Florence Pierce y Anthony Braxton, trasegando así, de manera personal, su percepción del gusto, lo bello y sus posturas frente a la música occidental europea. Ahondaré en piezas de la discografía de los compositores (una pieza de cada compositor) trayendo de ellas, coincidencias con las fuentes escritas, el resultado sonoro, el contexto sociocultural en el que fueron compuestas y su respectivo análisis musical. Estas piezas pasarán por el filtro foklorista de conceptos como el hecho musical folclórico y música popular de Carlos Vega, con la intención de poner en discusión si la música de estos compositores, alinean con un ejercicio compositivo desde las escuelas europeas que llegaron a Norteamérica o pretenden reivindicar orígenes de corte geográfico y cultural.